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Rodó: momentos de una Rama y su capilla

Basado en devocional ofrecido en la capilla de Barrio 4, el 10 de junio de 2016, con motivo de la celebración de su Conferencia de Barrio. Por Santiago Carbajal.


Origen de la Rama Rodó

El 5 de junio de 1948 se fundó la Rama Pocitos en Montevideo, y cuatro años más tarde se uniría a la Rama Universitaria para formar la Rama Rodó, cuyo primer local se ubicaba en Alfredo Baldomir 2416. Motivado por su rápido crecimiento se contrataría un nuevo local como centro de reuniones, esta vez, en Juan Manuel Blanes 1090. Luego, en 1952, al dividirse la Rama Comercial (Ex Villa Muñoz), la mitad de sus miembros se incorporan a Rodó.

A pesar de que la Rama permaneció poco tiempo en la casa ubicada en Juan Manuel Blanes 1090, se disfrutaron de momentos muy especiales como la dedicación del mismo local por el Presidente de la Misión Uruguaya Lyman S. Shreeve, el 31 de mayo de 1953, evento que él mismo declaró como: “Fue la conferencia más  sobresaliente de la Misión a la fecha”.

Algunas de las palabras ofrecidas en esa ocasión son las siguientes: “Oramos para que un día haya un Templo donde efectuar la obra por los muertos (…) Tu Espíritu esté siempre en esta Casa (…) oramos para que nada malo ingrese, ni nada en contra de nuestras creencias”.

La congregación de Rodó continuó aumentando en cantidad y belleza, por lo que el 18 de marzo 1954 se autorizó la compra de un predio en sito Acevedo Díaz 1479, a fin de construir una capilla y Hall de Recreo, la que en definitiva sería la segunda dedicada en Uruguay como Casa de Oración.


La construcción de la Capilla

El 11 de setiembre de 1954 tuvo lugar la ceremonia de Palada Inicial del nuevo terreno en Acevedo Díaz. Esta ceremonia estuvo presidida por el Presidente Lyman S. Shreeve, quien fue acompañado por sus consejeros Juan A, Magnone y un misionero.

El 11 de diciembre de ese año llegó a la Misión Uruguaya el Elder Mark E. Petersen del Cuórum de los Doce Apóstoles, y presidió la ceremonia de Colocación y Dedicación de la Piedra Angular de la capilla.

En su discurso a los presentes expresó: "Sacrificio trae bendiciones (…) Mi mensaje a ustedes hoy… es un ruego a que trabajen con sus corazones y sus manos, y den de sus recursos para la construcción de esta maravillosa casa de Dios”.

En efecto, los miembros de la Rama iban a tener que sacrificarse y participar con diligencia en pos de la capilla. Por medio de bailes, proyección de películas, banquetes, shows artísticos y culturales, jornadas deportivas, venta de manualidades, las donaciones de los miembros de toda la Misión y de la Iglesia del mundo, se logró alcanzar la meta de juntar los fondos necesarios para el proyecto.

Previo a la oración dedicatoria y colocación de la Piedra Angular el Elder Petersen expresó: “Me gustaría solicitar al Presidente Shreeve que selle la caja y la prepare para ponerla dentro de la Piedra…”. A fin de ilustrar dicha frase, cabe mencionar que dentro de la Piedra Angular se colocaba una caja de metal con objetos significativos y relacionados al evento, siendo lo que usualmente se conoce como una cápsula del tiempo. En esta ocasión, dentro de esa caja se colocaron los siguientes objetos: 

El Libro de Mormón.
Programa de la 5ta. Convención Anual de la Juventud.
Doctrina y Convenios.
Programa de ceremonia de Piedra Angular de capilla de Treinta y Tres.
Copia del discurso de Elder Mark E. Petersen en Treinta y Tres.
Planilla de asignación de misioneros.
Revista Deseret Oriental dedicada a la visita de Pte. David. O. McKay a Uruguay (1954).
Programa de ceremonia de Piedra Angular en Rodó.
Copia artículo diario “El Día” (11/12/1954).
Copia artículo diario “El País” (11/12/1954).

Puede que llegue el día en que esa caja se abra y tengamos la dicha de hallar tales tesoros que nos remontarán a esa ceremonia tan especial.

Posteriormente, con hermosas palabras oraría para dedicar la Piedra Angular: “Ahora, al colocar esta Piedra, y haber puesto en ella una caja conteniendo material histórico, dedicamos ambas a Ti, y a este edificio y la gran obra que este edificio representa. Oramos para que Tu paz y bendiciones estén aquí, y esta se vuelva un territorio sagrado y una Casa santa a Ti. Con este fin nos dedicamos a nosotros mismos y nuestro tiempo y talentos, y los hacemos en el nombre de Jesucristo. Amén.”

Consideramos de gran importancia señalar el significado de tales ceremonias y resaltar que de las oraciones dedicatorias aprendemos parte de su contenido, como el hecho de que el fin último no es construir un mero edificio, sino que es el de edificar las almas de los hombres, mujeres y niños que participan con sacrificio y fe de dichas obras. El edificio queda como testimonio de la fe y devoción de la gente que lo levantó. Como expresó el Elder Petersen en su oración, reiteramos: "Con este fin nos dedicamos a nosotros mismos y nuestro tiempo y talentos..."

Para ampliar este concepto podemos recurrir a las palabras utilizadas por el Presidente David O. McKay el 30 de enero de 1954 al dedicar la Piedra Angular de la Capilla de Deseret en Montevideo: 

“El propósito de estos edificios no está logrado cuando las paredes están construidas, el techo colocado firmemente, la torre terminada y se ha ofrecido la oración dedicatoria. Ellos son construidos para la edificación del alma. A menos que estos edificios sean usados para hacer buenos a los hombres… a las mujeres más hermosas en su naturaleza… todo este esfuerzo habrá sido en vano….”

“Al colocar esta piedra angular y orar que permanezca inamovible, nuestro deber es construir en nuestras  vidas caracteres tan sólidos como esa piedra en este edificio… mantened vuestra fe en Dios que está arriba…"


En relación a este acontecimiento, la revista de la Misión, El Deseret Oriental, registró: "En las primeras horas de la tarde el Apóstol Petersen colocó la piedra angular de la nueva capilla de Rodó durante una emotiva ceremonia. este fue un momento de gran emoción y regocijo para todos y muy especialmente para los miembros de la Rama. El coro del distrito Capital brindó la música para la ceremonia, y los discursos y la oración ofrecida por el Apóstol llenaron a todos con el espíritu de Dios. Más tarde, las Damitas y Abejeras de la Misión presentaron un buen programa el cual fue preparado y dirigido por la hermana Beverly Dutson. este programa, que tuvo lugar en los jardines de la capilla, terminó con una hermosa ceremonia de la plantación de un rosal simbólico".


Dedicación de la capilla

El día de la dedicación de la capilla llegó un 3 de junio de 1956. Toda la Misión estaba al tanto del evento y de la llegada del Elder Henry D. Moyle del Cuórum de los Doce Apóstoles, quien presidiría la ceremonia y ofrecería la oración dedicatoria. A su vez, este Apóstol presidiría una ceremonia similar en Treinta y Tres. En este momento el Presidente de la Misión Uruguaya era Frank D. Parry.

Fragmentos de la Oración Dedicatoria:

"Estamos agradecidos a Ti, Padre Celestial, por todos aquellos que han ayudado a construir este edificio, y por todos aquellos que la han diseñado de forma tan hermosa."

Ahora, Padre, al presentar este edificio a Ti como una casa de adoración, pedimos que Tu la aceptes... que pueda ser dedicada en los Cielos y sea un lugar donde habite Tu Espíritu -habite en el corazón de todos los que vengan aquí a aprender de Ti y tus vías (...) que sea una luz en las vidas de quienes entren a aprender de Ti, que puedan venir aquí a la luz, por así decirlo, apartarse de las tinieblas. Que Tu Espíritu ilumine sus mentes y sus almas..."

"(...) Concede Padre, que tus bendiciones sostengan a todos los que ingresen a este edificio a adorarte y a quienes de una forma u otra asisten a otros a disfrutar de las bendiciones de Tu santa luz."

"Padre, concede que aquellos que pasen por (el frente) este edificio puedan sentirse inspirados a consultar por su propósito y se sientan libres de ingresar, y a participar de la adoración, porque, Padre,  esta noche abrimos las puertas para todos nuestros hermanos y hermanas de la tierra a fin de que adoren junto a nosotros."

"(...) Que este sea un lugar de paz, en que aquellos que están desconsolados puedan recibir consuelo, que aquellos que están enfermos puedan venir a ser bendecidos y recibir sanación..."

"(...) Que hagamos tal uso de este edificio para que podamos acercarnos constantemente a Ti y nos mantenga a tono con Tu santo Espíritu."

El salón recreativo fue inaugurado el 17 de julio de 1956 con baile.

La capilla de Rodó como una Obra de Arte Plástico


Recorte de periódico cortesía de Alba Iris Camejo de Romero (Durazno) - 1956.

En abril de 1956 se publicó en un periódico capitalino, un interesante artículo relacionado a la capilla Rodó, la que se considera más que un simple edificio bello, sino que una "obra de arte plástico integral". Por el mismo conocemos que el arquitecto de la obra fue Antonio L. Cravotto que en coordinación del escultor Germán Cabrera completaron tan hermosa obra.

En su momento fue apreciada como una obra de "verdadero relieve... tan sobria y mesurada como novedosa en el ambiente montevideano". En relación a la icónica torre de la capilla, se señala que el escultor Germán Cabrera "compuso y talló" en piedra arsénica "siguiendo la vertical de la torre, un notable juego de formas subliminalmente decorativas, que son integrantes destacados del plan total y conjunto plástico. No se trata pues de meros adornos de un edificio... es, en efecto, una obra de arte plástico integral."


Visitas de Apóstoles

En febrero de 1959 el Elder Spencer W. Kimball visitó y recorrió todas las Ramas de Uruguay. En Montevideo realizó una conferencia en la capilla de Rodó el 22 de febrero. En la segunda Sesión de dicho encuentro expresó palabras proféticas que fueron registradas: “Declaró que un día habría un Templo aquí en Sudamérica y que deberían prepararse para ser dignos de ingresar”.


En octubre del mismo año se hallaba en gira por las misiones sudamericanas el Elder Harold B. Lee del mismo Cuórum de los Doce Apóstoles, y en Montevideo se dirigió a los miembros desde la capilla de Rodó el 4 de octubre.

En cuanto a esta visita, se registra un hecho sencillo pero digno de recordar, como la manifestación del don de interpretación de lenguas de parte de algunos de los presentes. Se informó al concluir:


César A. Guerra traduciendo al Elder Harold B. Lee
en capilla Rodó, Montevideo, 4 de octubre de 1959

"El don de interpretación de lenguas estuvo innegablemente presente… Al finalizar, Elder Lee se sorprendió de que los oyentes no hablaban inglés, y expresó: 'Yo estaba tan seguro de que manejaban la lengua inglesa, porque asentían con su cabeza durante mi discurso aún antes de que las palabras fueron traducidas'."


Izq. a derecha: Hija de Pte. Arthur Jensen (centro) entregando
obsequio a esposa de Elder Ezra Tafta Benson,
En octubre de 1960, el Elder Ezra Taft Benson del Cuórum de los Doce Apóstoles visitó Uruguay entre otros países sudamericanos, como emisario del presidente de Los Estados Unidos Eisenhower, ya que se desempeñaba como Secretario de Estado de tal gobierno.
El 26 de octubre se realizó una reunión especial por motivo de su visita en la capilla de la Rama Rodó. De su discurso se destacan las palabras reproducidas en la revista Liahona de 1961 bajo el título "Ambas Américas son Sión". En este artículo compartimos un breve fragmento: "Estamos avanzando rápidamente hacia el momento en que tendremos una Estaca de Sión aquí… y cuando tendremos templos en esta hermosa tierra, pues al fin y al cabo es parte de la tierra de Sión (…) Norte y Sur América son la tierra de Sión…”.

Congregación solicitando autógrafo a Elder Ezra T. Benson (centro).

Al finalizar el encuentro, la hija del Presidente de la Misión Arthur Jensen obsequió a la familia Benson un ejemplar del libro "La tierra purpúrea" (1875) de Guillermo Enrique Hudson, que narra las aventuras de un visitante en la Banda Oriental, y los miembros rodearon al Elder Benson solicitando su autógrafo, a lo cual él accedió como era común en esa época.


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