VOLVERÁ EL CORAZÓN

RAMA ARROYITO de ROSARIO Volverá el Corazón rinde tributo a los pioneros de Argentina, por su valor y compromiso al aceptar el evangelio en la primera mitad del Siglo XX, dando lugar a su restauración en Sudamérica, y por abrirse camine ante la oposición y desafíos de las primeras décadas, para luego constituirse en una Misión hermana y tutora de la Uruguaya.  Deseamos que con este humilde aporte, nuestro corazón se vuelva agradecido a los heroicos días de los pioneros, y logremos así emular su dedicación y fe triunfante. Esta será la primera de una serie de publicaciones relacionadas a la fundación de las Ramas Argentinas, en orden aleatorio, extraídas de la revista El Mensajero Deseret: 

Por Santiago Carbajal Teniendo presente la misión encomendada por el Señor de ir por todo el mundo predicando y bautizando, el Presidente de la Iglesia George Albert Smith, al dedicar el Templo de Idaho Falls el 23 de setiembre de 1945, oró diciendo: “Oramos para que las barreras que han bloqueado el camino a la prédica del Evangelio a muchos de los habitantes de las naciones del mundo sean desplomadas y barridas, de modo que Tus siervos, los misioneros, puedan llevar el evangelio de paz y buena voluntad a los honestos de corazón en cada nación bajo el cielo.” [i] Parte de ese ruego recibió respuesta en Sudamérica pocos años después, dado que en 1947 se establece la Iglesia en Uruguay, y a finales de 1949 la Primera Presidencia y el Quórum de los Doce consideran oportuno enviar misioneros a fundar la Iglesia oficialmente en Paraguay. Antecedentes Los Williams y Carlos Rodríguez bajo el Tarumá que dió sombra a Artigas en su  destierro en Paraguay (Mensajero D

Rama Arroyo Seco Las congregaciones de la Iglesia en Uruguay poseen una historia encantadora. Surgidas cada una de ellas por medio de la fe y esfuerzos de jóvenes misioneros, que sin titubeos a pesar de sus debilidades, se dispusieron a predicar con entusiasmo y creatividad a un pueblo respetuoso pero en su mayoría indiferente al tema religioso, y juntaron alrededor de sí a un puñado de orientales de todas las edades que aceptaron con compromiso el Evangelio  restaurado, forjando también una amistad verdadera. Compartimos un breve relato sobre la fundación de la Rama Arroyo Seco, publicado en la revista El Mensajero Deseret bajo el título "Nuestras Ramas Uruguayas", en junio de 1950. El paso del tiempo y el cambio en la denominación de las Unidades de Montevideo dificulta establecer el origen de ellas, sin embargo, los registros nos dan las pistas necesarias para su conocimiento. En el caso de la Rama Arroyo Seco cabe señalar que se combinó con l

Publicación realizada en marzo de 1950 por medio de la revista oficial de la Misión Argentina y Uruguaya "El Mensajero Deseret".